Soy mujer.
Y un entrañable calor me abriga
cuando el mundo me golpea.
Es el calor de las otras mujeres,
de aquellas que hicieron de la vida
este rincón sensible, luchador,
de piel suave y corazón guerrero.
Alejandra Pizarnik
Ser científica. Ser útil. Ser exitosa. Ser madre. Ser independiente. Ser amante. Ser hija. Ser hermana. Ser compañía. Ser voz. Ser ruido. Ser incómoda. Ser suficiente.
Las mujeres a lo largo de sus vidas han interpretado diferentes papeles y hemos observado también cómo en los últimos tiempos una gran cantidad de sectores van sumando más nombres femeninos en sus programaciones. Las mujeres han pasado de ser seres totalmente silenciadas por la historia, y por el mercado, a estar, al menos, presentes y hacerse sentir.
Se ha visibilizado a las mujeres como incapaces de asumir cargos y liderazgos, de asumir funciones de riesgo, a pesar de haber demostrado lo contrario. Y aunque se pueda pensar que las mujeres están rotas, ellas saben como recomponerse de inmediato
A las mujeres no les ha sido fácil hacer historia por ellas mismas, la lucha por la visibilidad femenina es difícil y lleva registrándose desde siempre, pero no ha decaído en un solo momento. He ahí la fortaleza de una mujer.
Sin embargo, no dejan de surgir varias preguntas. Si las mujeres representan un 49,5 % de la población mundial: ¿Por qué debe existir una lucha por la igualdad si no son minoría? ¿Por qué una lucha por la igualdad si son tan preparadas y resilientes como el promedio de hombres? ¿Por qué?
Lo cierto es que las mujeres tienen que dar una batalla por la igualdad desde la misma trinchera de las minorías y de los más débiles. Para lograr el desarrollo sostenible y una mayor igualdad de género en una sociedad es esencial seguir explorando las oportunidades y limitaciones que permitan que las mujeres y las niñas tengan voz y participen en igualdad en la toma de decisiones en diferentes aspectos. Sin igualdad de género hoy, el futuro sostenible e igualitario seguirá estando fuera de nuestro alcance.
Ser mujeres no es solo el 8 de marzo. Es de siempre. Es de todos los días. Es conjunta.